Aunque para muchas personas, la piel sea percibida como solo la capa encargada de proteger a nuestro organismo y mantenerlo separado del medio ambiente, cosa que es cierta, también tiene otros tipos de funciones igualmente importantes para el funcionamiento del cuerpo y el mantenimiento de la salud.
Resulta que la piel, aunque parezca solo un tejido, es de hecho un órgano más extenso del cuerpo, pudiendo alcanzar una superficie de aproximadamente 2 metros cuadrados y un peso que puede llegar alrededor de los 4 kilogramos, supuesto aproximadamente el 6% del peso total del cuerpo.
Funciones principales
Como todo órgano, la piel cuenta con una serie de funciones importantísimas en el funcionamiento y equilibrio del organismo, dentro de ellas podemos mencionar las siguientes.
- Función protectora: Este es el punto más obvio, pues todo sabemos que esta es una barrera indispensable para frenar el ingreso de sustancias tóxicas y químicas, así como para enfrentar amenazas mecánicas o incluso para filtrar los rayos ultravioletas.
- Función termorreguladora: Otras de las funciones básicas de la piel es mantener un equilibrio de la temperatura del cuerpo, protegiendo tanto del frío como del calor que se pueda sentir en el medio ambiente.
- Sensorial: La piel cuenta con receptores y terminaciones nerviosas que nos permiten ejercer el tacto o sentir la temperatura, el dolor y la presión.
- Función del equilibrio hidroelectrolítico: Además de no dejar entrar sustancias, la piel también ayuda a mantener otras dentro del cuerpo, ya que esta también es responsable de mantener un balance de fluidos corporales, sobre ayudando a prevenir la perdida de agua.
- Función emocional: A través de la piel se exteriorizan distintas emociones, por eso es común que sonrojemos, que se erice o que se palidezca, incluso sirve para emanar feromonas o para generar alertas de lagunas enfermedades que pueden estar actuando dentro de nuestro cuerpo.
¿Cómo es la estructura de la piel?
Aunque muchas para muchas personas la piel no es más que la capa superficial que podemos observar a simple vista, resulta que este órgano tan complejo tiene distintas capas y elementos que la componen.
- Epidermis: Esta capa tiene puede tener un grosor diferente en cada parte del cuerpo, pudiendo alcanzar desde 0,1mm en unas zonas hasta 2mm en otras, además de representar la capa con más células.
- Dermis: Esta es capa encargada de brindarle soporte a la piel, del mismo modo que es la responsable de hacerla elástica y resistente, aquí se encuentran vasos sanguíneos y linfáticos, glándulas sudoríparas, glándulas sebáceas, folículos pilosos y lo que se conoce como tejido conjuntivo.
- Hipodermis: Esta es la capa más profunda y esencialmente está compuesta es de grasa.
Tipos de piel
La piel puede ser diferente en cada persona, sobre todo porque el fluido que segregan tanto las glándulas sudoríparas como las glándulas sebáceas suelen ser de diferentes tipos, por eso la piel se puede clasificar en tres tipos.
- Piel seca o piel normal: Estas son las pieles que segregan un líquido acuoso.
- Piel grasa: producen fluidos oleosos.
- Mixta: esta es la que segrega equilibradamente fluidos tanto acuosos como aceitosos.
Cuidados de la piel
Como todo órgano debe tener un cuidado especial, por eso es importante seguir algunos consejos básicos que nos ayudará a tenerla en buen estado.
- Mantener un higiene diaria
- Beber abundante agua
- Mantener un buen alimentación
- Realzar actividad física
- Usar protector solar y productos para el cuidado de la piel
- Visitar periódicamente al dermatólogo