El agua es uno de los elementos nutritivos más importantes para cualquier persona. El organismo necesita mantenerse hidratado permanentemente para estar saludable y funcionar correctamente. Una deshidratación grave puede acabar incluso en fallecimiento de la persona.
La principal fuente de hidratación para cualquier persona es el agua, aunque también existen determinados alimentos con una elevada cantidad de agua en su composición. Además, la ingesta de frutas o infusiones también ayuda a mantenernos hidratados.
Por otra parte, sustancias como las bebidas alcohólicas provocan una deshidratación en el organismo. Es por ello, que las personas con resaca sienten la necesidad constante de beber agua.
¿Cuánta agua debemos consumir al día?
El agua es fundamental para que las diferentes estructuras que integran el organismo puedan desarrollar todos sus procesos de forma correcta. En este sentido, las personas necesitan tomar al día, como mínimo, unos dos litros de agua.

Y es que mantenerse hidratados y beber una buena cantidad de agua repercute beneficiosamente en el organismo. Este hecho ayuda a reducir la fatiga, evita el dolor de cabeza y migrañas, regula la temperatura del cuerpo y estimula la acción del sistema inmune.
Igualmente, también contribuye a disminuir el riesgo de problemas cardíacos, reduce el riesgo de cáncer, mejora la digestión, evita el restreñimiento y es altamente necesario para lucir una piel saludable.
Perjuicios de un exceso de hidratación
A pesar de los importantes beneficios de la hidratación, beber demasiada agua puede ser perjudicial para el organismo. Este fenómeno se conoce como hiperhidratación, aunque es una afección que se da en reducidas ocasiones.
Normalmente, las personas que no presentan problemas en los riñones, tienden a eliminar el exceso de agua a través de la orina.
La hiperhidratación es una situación que se produce cuando una persona bebe mayor cantidad de agua de la que su organismo necesita o requiere para el funcionamiento de determinadas funciones. Cuanto esto ocurre, el organismo tiene un exceso de agua y niveles demasiado bajos de sodio en sangre.
Según indican desde ‘Manual MSD‘ «para superar la capacidad de eliminación de agua del organismo, un adulto joven en que la funcionalidad renal sea adecuada debería beber más de 24 L de agua al día de modo habitual».
No obstante, puede ocurrir que una persona con problemas de riñón no elimine correctamente el exceso de agua en el organismo. En ese sentido, existe un mayor riesgo de hiperhidratación. Algunos medicamentos también pueden causar sobrehidratación.
Así, cuando existe un exceso de agua en el organismo, este hecho se manifiesta a través de diferentes síntomas. En este aspecto, es necesario tener en cuenta que las neuronas son especialmente sensibles a la hiperhidratación y a los niveles bajos de sodio en sangre.
En este sentido, cuando la hiperhidratación tiene lugar de forma rápida, pueden aparecer vómitos y problemas relacionados con el equilibrio; además de confusión o convulsiones.
Por tanto, en caso de exceso de agua en el organismo, el principal tratamiento consiste en reducir la ingesta de líquidos y establecer una dieta rica en diuréticos, que permita eliminar el exceso de líquidos en el cuerpo, hasta encontrar nuevamente un equilibrio.