La jubilación es ese momento vital de una persona que decide poner fin a su etapa laboral. Sin embargo, este paso no tiene las mismas consecuencias para todo el mundo, pues es fundamental, contar con un sustento económico que permita dar este paso. Es por ello, que España cuenta con un plan de pensiones en el que el trabajador va aportando una parte de su sueldo durante toda su vida en activo, para que llegado el momento de parar, poder cobrar una pensión mensual que le permita mantener el nivel adquisitivo.
El problema es que para acceder a dicha pensión, deben cumplirse una serie de requisitos como son cumplir con la edad legal de jubilación, y haber cotizado una serie de años a la Seguridad Social. El problema es que en ocasiones, hay personas que no cumplen con este segundo requisito, ¿Qué ocurre en estos casos? Cabe recordar, que para acceder a una pensión contributiva por jubilación, la Seguridad Social exige haber cotizado durante al menos 15 años. Pero, ¿Qué pasa si no se cumple este requisito?
Consecuencias de no alcanzar los mínimos de cotización para la jubilación
Para acceder a una pensión contributiva de jubilación, es obligatorio acreditar que se cumple con el mínimo establecido por la Seguridad Social para ello, esto es, al menos 15 años. Cabe señalar además, que con 15 años cotizados se puede acceder a una pensión ordinaria, pero son más años los que deben acreditarse para conseguir una pensión más amplia. Pues la cuantía de esta prestación depende precisamente, entre otras cosas, de los años cotizados por el trabajador.
Por tanto, con menos de 15 años cotizados no se puede acceder ni a una parte de la pensión. Cabe recordar, tal y como indican desde Campmany Abogados, que «la ley estipula que el mínimo de base reguladora a percibir es el 50 por ciento, esta opción solo está disponible para los trabajadores que hayan cotizado lo bastante como para, en primer lugar, tener acceso a la pensión. Y la cifra para conseguirlo es de 15 años de cotización». Por tanto, solo teniendo más de 15 años cotizados, se puede acceder a un porcentaje mayor al 50 por ciento.
¿Qué opciones tiene una persona que no ha cotizado lo suficiente?
A pesar de que una persona no pueda acceder a la pensión contributiva por jubilación por no contar con los años mínimos cotizados, en España el sistema ofrece otras opciones. Una de ellas, es la de la pensión no contributiva de jubilación. En este caso, se trata de una prestación para las personas en edad de jubilación que se encuentran en una mala situación económica. No obstante, también debe cumplir una serie de requisitos, como son:
- Reside de forma legal en España.
- Cobrando la pensión, no se puede mudar a otro país.
- No contar con ingresos económicos o que las rentas sean inferiores a lo establecido cada año por el Ejecutivo.
- Tener al menos 65 años de edad.
En cuanto al importe a percibir con esta modalidad, cabe recordar que en el caso de la pensión contributiva, la cuantía se establece dependiendo de la base de cotización del trabajador y los años en activo, pero esto no se tiene en cuenta en el caso de la pensión no contributiva. En este caso, sí existe una cuantía fija para todo el que acceda a la prestación que está en torno a los 560 euros al mes.
Por tanto, una persona que no haya cotizado los mínimos establecidos en España, no podrá acceder a una pensión contributiva en ningún caso. De hecho, por debajo de los 15 años de cotización, da igual si una persona ha cotizado 14 años o ninguno. En este caso, la alternativa es la pensión no contributiva.