Comprar una vivienda es un deseo que para muchos ciudadanos cada vez es más difícil de conseguir. Buscar un inmueble con las características que necesitamos, a un precio que podamos cubrir y conseguir una hipoteca asumible, se ha convertido en todo un reto. Y es que el precio del mercado inmobiliario en España sigue desorbitado, y a pesar de poder pedir un préstamo, el comprador debe contar con una cuantía inicial que en muchos casos se escapa de su alcance.
La buena noticia, es que la legislación española contempla algunas herramientas muy útiles que sirven como alternativa a la compraventa habitual. Una de ellas es la compraventa con pago aplazado. Se trata de una fórmula en la que el comprador puede acceder al inmueble sin tener que pagar la totalidad de la vivienda en el momento de la firma, a cambio, tiene la opción de hacerlo en pagos fraccionados que debe acordar con el vendedor. Una forma de tener facilidades de pagar en cómodos plazos, sin necesidad de pedir una hipoteca al banco.
Compraventa de vivienda con pago aplazado
La compra de una vivienda se vuelve aun más imposible si no se cuentan con facilidades para realizar el pago. Son pocas las personas que pueden afrontar el desembolso de una cantidad como la que hay que pagar en una compra como esta. Bien es cierto, que existen recursos financieros como las hipotecas, sin embargo, los intereses y demás condiciones del contrato, pueden aumentar de forma exponencial el precio final a pagar por un inmueble.
Es por ello, que la compraventa con pago aplazado puede ser una buena opción. En este caso, el comprador de la vivienda se compromete, bajo unas condiciones, a pagar a plazos el precio total del inmueble. A priori, puede parecer un método poco seguro, pero se trata de un trámite que debe realizarse con contrato y todas las garantías. Es decir, las partes acordarán determinadas garantías, como que el comprador no reciba la propiedad hasta haber pagado una determinada cantidad, o que el contrato se resuelva en caso de incumplimiento de pago.
Desde Idealista, han publicado algunas de las obligaciones que en este proceso adquieren tanto el comprador, como el vendedor. En el caso del comprador, estas obligaciones son:
- Abonar el precio acordado según las condiciones fijadas en el contrato
- Realizar los pagos en los plazos, cantidades y formas pactadas
- Pagar los intereses pactados, si los hubiera
En lo que se refiere a las obligaciones del vendedor destacan:
- Entregar el bien objeto de la compraventa
- Transmitir la propiedad según lo estipulado en el contrato
- Si se ha pactado una condición suspensiva o reserva de dominio, la propiedad se transfiere solo al completar el pago total
Así debe realizarse un contrato para que este sistema sea eficaz
Lo más seguro tanto para el vendedor como para el comprador en una compraventa de vivienda con pago aplazado, es que todo lo acordado quede recogido de forma oficial. Bien es cierto, que existe la posibilidad de realizar una escritura pública o un documento privado. El caso de la escritura pública el problema es que en ocasiones, queda supeditada al pago íntegro del precio de venta, pero es más seguro. El documento privado no ofrece garantías totales al comprador.
En cualquier caso, es la escritura de compraventa de la vivienda con pago aplazado, se deben establecer claramente las condiciones que rigen la transmisión de la propiedad. Esto significa, según establecen desde Idealista, que el documento debe incluir los siguientes puntos:
- Las condiciones acordadas para la compraventa y la posterior transmisión de la propiedad.
- El precio pactado.
- El calendario de pagos, especificando la periodicidad, las cantidades a abonar y la duración total.
- Las garantías que respalden el cumplimiento de los pagos.