El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) es el organismo encargado de otorgar el derecho a percibir una pensión de incapacidad permanente. En caso de solicitud denegada o resolución insatisfactoria, la parte solicitante tiene la posibilidad de presentar una reclamación previa ante el INSS. Además, en última instancia, puede lograr la pensión de incapacidad permanente a través de la Justicia.
Los ciudadanos disponen de un plazo de 30 días hábiles desde la recepción de la solicitud para presentar la Reclamación Previa ante el INSS. Puede darse el caso de que el solicitante no reciba respuesta alguna después de haber realizado la primera solicitud de incapacidad permanente, la cual se entenderá como denegada por silencio administrativo.
En caso de que se produzca silencio administrativo, los 30 días hábiles para presentar la Reclamación Previa comienzan a contar desde que se considera que ha tenido lugar el silencio administrativo. Normalmente, superado los 135 días hábiles que dispone el INSS para ofrecer una resolución sobre la solicitud de incapacidad permanente.
Después de realizar la Reclamación Previa, el INSS dispone de 45 días hábiles como máximo para ofrecer una resolución. En esta ocasión, también podría darse el caso de resolución denegada por silencio administrativo. En este caso, el ciudadano puede acudir a la justicia como última instancia para luchar por obtener la incapacidad permanente.
Para acudir a la Justicia es recomendable que un abogado especialista analice nuestro caso previamente y determine las posibilidades de éxito. Así, se dispone de un plazo de 30 días hábiles desde la desestimación de la Reclamación Previa para presentar la demanda judicial contra el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
Reclamación Previa de incapacidad permanente
La Reclamación Previa consiste en un escrito que se debe realizar bajo unos parámetros concretos, y no siempre resulta sencillo. Además, los expertos de ‘CampmanyAbogados‘ argumentan que la mayoría de las reclamaciones previas son nuevamente desestimadas por parte del Instituto Nacional de la Seguridad Social.
Hay que tener claro que la Reclamación Previa es el último paso antes de acudir a la vía judicial para lograr una pensión de incapacidad permanente. Por todo ello, los expertos ofrecen una serie de recomendaciones para que este escrito se haga bajo los cánones correctos:
- Redacta la Reclamación Previa con un lenguaje claro y lo más objetivo posible.
- Es necesario incluir el número de expediente del INSS y los datos personales.
- Resulta fundamental añadir los informes médicos nuevos con todas las lesiones o enfermedades.
- Recoger las limitaciones para trabajar.
- Describir posibles antecedentes relacionados con la actividad laboral.
- Explicar por qué no estás conforme con la decisión tomada respecto a la solicitud de incapacidad permanente.
- Indicar el grado de incapacidad permanente exigido.
En ocasiones, para muchas personas puede resultar complejo elaborar un escrito de estas características, y con la importancia que conlleva. Por eso es recomendable contar con la ayuda de un profesional. Cuanto más completo sea nuestro escrito, mayores posibilidades habrá de obtener el reconocimiento de la incapacidad permanente por parte del Instituto Nacional de la Seguridad Social.