La presencia de humedad es inevitable en algunas partes de nuestro hogar como, por ejemplo, en los baños. Y aunque su grado puede variar dependiendo de la ventilación de cada espacio, siempre estará presente en esta área del hogar.
Tras una ducha o un relajante baño caliente, las superficies como paredes, puertas, pisos y espejos quedan cubiertas de una fina capa de humedad, que se manifiestan en pequeñas gotas de agua condensada. En general, estas no suelen ser problemáticas, dado que los materiales comúnmente utilizados en los baños suelen ser resistentes a la humedad.
Sin embargo, la humedad crea un ambiente propicio para el crecimiento de moho y bacterias, lo cual representa el verdadero desafío que debemos abordar. El objetivo principal será reducir el exceso de vapor. Es por eso que te ofrecemos algunos consejos prácticos que te ayudarán a controlar la humedad en tu baño.
Consejos para eliminar la humedad del baño
Si quieres eliminar la humedad del baño de forma definitiva, puedes tomar nota de estos consejos prácticos que te harán evitar esa condensación del agua que, finalmente, puede producir moho y humedades en cualquier rincón del baño.
- Agua fría: Para reducir la humedad en el baño, llena la bañera con agua fría antes de utilizar el agua caliente.
- Abre las ventanas: Aunque parece algo evidente, a menudo pasamos por alto la acción de abrir las ventanas después de una ducha o baño. Este simple paso ayuda a regular la temperatura del baño y a prevenir el exceso de humedad en el ambiente.
- Usa un extractor si no tienes ventanas: Si no tienes ventanas en tu baño, un extractor de aire se convierte en la mejor solución. Este dispositivo dirige el vapor acumulado hacia afuera. Es crucial asegurarse de que la salida esté despejada, verificar la correcta instalación del extractor y elegir una potencia adecuada según las dimensiones de tu baño.
- Instala un termostato: Una grifería termostática no solo optimizará el uso del agua, sino que también ajustará automáticamente la temperatura del agua, reduciendo así la condensación de vapor y, por ende, la humedad en el ambiente del baño.
- Ventanas de cristales dobles: Cuanto mayor sea el aislamiento térmico, menos vapor se generará en el baño, ya que se reduce significativamente la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior de la ducha, lo que resulta en una menor acumulación de vapor. El uso de ventanas de doble acristalamiento proporciona esta ventaja. Aunque aún será necesario abrir las ventanas después del baño, es probable que solo necesites mantenerlas abiertas por unos pocos minutos.
- Calentador en el baño: Durante el invierno, calentar el baño será una excelente opción para prevenir la acumulación excesiva de humedad. El aire caliente generado por la calefacción ayudará a evitar la formación de vapor, reduciendo así la presencia de condensación en el ambiente del baño.
Así que si quieres eliminar la humedad del baño de forma definitiva, toma nota de estos consejos que te hemos contado ya que será la mejor forma de que desaparezca para siempre.