Cuando sufrimos un accidente considerado leve con el coche, tenemos derecho a cobrar una indemnización por los daños sufridos. Esto puede solicitarse a la aseguradora siempre y cuando seamos los responsables del accidente, y no queramos arreglarlo por cualquier motivo. En caso contrario, la aseguradora se hará cargo de las reparaciones.
Y es que muchas personas eligen cobrar el dinero de los daños antes que repararlo, ya sea porque quieren cambiarlo pronto o porque no les interesa. En cualquier caso, para saber en qué ocasiones podemos recibir la indemnización, tendremos que revisar la Ley de Contrato de Seguros en España.
Cuándo cobrar la indemnización del coche sin repararlo
La Ley de Contrato de Seguridad establece en su artículo 18 que “solo cuando la naturaleza del seguro lo permita y el asegurado lo consienta, la compañía podrá sustituir el pago de la indemnización por la reparación o reposición del objeto siniestrado”.
Es decir, la aseguradora podrá facilitar el dinero de los daños sufridos en el coche siempre que el conductor lo solicite. En ningún caso podrá ser motivo de negativa del pago el uso que el afectado le de a ese dinero posteriormente.
En cualquier caso, te recomendamos que revises el contrato con la aseguradora para saber cuáles son los casos en los que se puede negar a pagarte la indemnización. Por norma general, las aseguradoras aconsejan reparar el coche accidentado. No obstante, tú puedes solicitar el pago de la indemnización y encargarte de llevarlo a un taller o quedarte con el dinero.
¿Qué recomiendan los expertos para tu beneficio?
La elección de la persona afectada por un accidente leve de coche, es muy personal. Todo depende de la situación económica del usuario, el estado del vehículo y el grado de responsabilidad que haya tenido en el altercado. No obstante, los expertos coinciden en que hay algo que debemos tener en cuenta a la hora de elegir la mejor opción.
Las aseguradoras suelen recomendar que les cedan el proceso de contratación del taller, ya que ellos tienen más facilidades para encontrar talleres baratos. Sin embargo, esto no siempre es una ventaja para el afectado, ya que puede que el arreglo no sea correcto.
Por esta razón, los expertos recomiendan que, si es posible y consta en la póliza del seguro, elijamos cobrar la indemnización por los daños sufridos. Así, podremos elegir el taller que más nos convenza o aquel en el que tengamos más confianza.
En cualquier caso, es esencial saber que la aseguradora no tiene la obligación de reparar el vehículo si el usuario así lo desea. La Ley de Contrato de Seguros obliga a la compañía al pago de la prestación y, además, debe hacerlo en un plazo no superior a 40 días.