Las personas que tengan una discapacidad del 33% o superior, y cuenten con su correspondiente documento que lo acredite, van a contar con una serie de beneficios, ya sean fiscales, prestaciones, deducciones o relacionados con el empleo. Pero para ello deberá de tener la tarjeta acreditativa del grado de discapacidad, un elemento de gran valor para estas personas.
Para conseguir esta tarjeta acreditativa, el trámite se puede realizar por Internet, a través de la página web de cada Comunidad Autónoma. El interesado, o persona titular, deberá de presentar la solicitud totalmente cumplimentada en el centro Base de la Comunidad Autónoma que le corresponda o cualquiera de los registros públicos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la discapacidad como la interacción entre personas que tienen algún problema de salud y ciertos factores personales y ambientales. Se calcula que más de mil millones de personas experimentan discapacidad, cifra que corresponde aproximadamente al 15% de la población mundial
Beneficios fiscales por tener un 33% o más de discapacidad
A continuación vamos a desarrollar los diferentes tipos de beneficios fiscales que tiene una persona cuando posee un 33 por ciento o más grado de discapacidad.
Deducciones sobre el IRPF
Uno de los grandes beneficios fiscales se encuentra a la hora de realizar la declaración de la renta, y es que la Ley del Impuesto sobre la Renta de Personas Físicas (IRPF) tiene muy en cuenta a las personas con discapacidad y sus familias.
En este sentido, las personas con una discapacidad reconocida del 33% pueden aplicar las deducciones sobre la cuota autonómica en su IRPF, aunque esto dependerá de la normativa establecida en cada Comunidad Autónoma.
Descuentos en ocio y cultura
En el ámbito de ocio y cultura, las personas con discapacidad cuentan con distintos descuentos, incluso entradas gratis, tanto en instituciones públicas como en empresas privadas.
Ayudas en educación
Las personas con discapacidad superior al 33 por ciento pueden pedir ayudas económicas para hacer frente al pago de:
- Libros de texto
- Ayudas para el transporte
- Pago del comedor
- Becas en educación especial
- Reservas en plazas de acceso a la Universidad
Descuentos transporte público
Las personas con discapacidad pueden solicitar abonos para viajar en transporte público a precio reducido. Eso sí, debemos de tener en cuenta que el grado de discapacidad puede variar en función de cada comunidad autónoma.
Adaptación de viviendas y vehículos
Uno de los beneficios fiscales más utilizados por las personas con discapacidad es a la hora de pedir ayudas con el objetivo de facilitar la adaptación de las viviendas y vehículos. Todo ello con un objetivo claro: desarrollar la autonomía personal.
Por ejemplo, aquí entrarían las ayudas para la instalación de las sillas o plataformas salvaescaleras, los elevadores o ascensores, así como otras soluciones para la accesibilidad que faciliten la supresión de las barreras arquitectónicas para las personas con discapacidad.
Ayudas para la compra de viviendas de protección oficial
Con relación a la vivienda, también encontramos ayudas destinadas a la compra de viviendas de protección oficial. En este caso, existen dos tipos:
- Subvención de los intereses del préstamo solicitado para la misma.
- Ayudas para la entrada que variarán dependiendo del plan de vivienda al que se acoja el beneficiario.
Pagos en equipos médico
Las personas con discapacidad pueden solicitar el pago total o parcial del equipo médico que necesiten, como prótesis o sillas de ruedas. La ayuda recibida vendrá determinada por:
- Grado de incapacidad del paciente
- Renta
- Estado de su unidad familiar
Plazas reservadas de empleo
A las personas con discapacidad les cuesta más encontrar trabajo. Eso es una obviedad. Por eso, dentro de los beneficios fiscales encontramos las plazas reservadas al empleo para personas con discapacidad reconocida.
Por ejemplo, en empresas a partir de 50 empleados un 2% como mínimo de la plantilla debe estar formada por trabajadores con alguna discapacidad acreditada. Es decir en una empresa de 100 personas, 2 deberían tener discapacidad.
Ayudas para su vehículo
Otras de las ayudas más demandas por las personas con discapacidad o superior del 33% son las relacionadas con el vehículo. En este sentido, pueden tener la reducción y/o exención del impuesto de matriculación. Además, también quedan exentos de pagar el impuesto municipal de circulación.
Otro beneficio relacionado con el vehículo es que las personas con discapacidad disponen de una reducción del IVA para la adquisición y reparación de su vehículo.
Por último, las personas que entran en el baremo de movilidad reducida pueden solicitar la tarjeta de aparcamiento para estacionar en plazas reservadas.