La domótica es el conjunto de tecnologías que permiten el control inteligente de nuestra vivienda. Esto es, la instalación de sistemas con los que programar, modificar o activar de manera automática, los dispositivos tecnológicos instalados en la misma. Es una forma de facilitarnos la vida y aportar comodidad a tareas del día a día.
De este modo, dentro de la domótica del hogar podemos tener sistemas de seguridad, vigilancia, opción de regular las luces automáticamente, control de la temperatura a distancia, programar electrodomésticos para cocinar, y un sinfín de funciones que aportarán comodidad de manera fácil a cualquier persona.
Estas ventajas para facilitar la vida de las personas, pueden ser especialmente interesante si las enfocamos a las personas mayores. La domótica puede mejorar la calidad de vida de este gremio facilitándoles tareas diarias, teniendo asistencia sanitaria a la mano e incluso aportando seguridad a aquellos que viven solos.
Domótica para mejorar la calidad de vida en la tercera edad
La soledad es una de las lacras que más acusan las personas de la tercera edad. En un país que tiende cada vez más al envejecimiento de su población, es vital atender en primera instancia a las necesidades de este gremio. Por ello, la facilidad de acceso a la domótica puede ser una buena opción para facilitarles tareas diarias, así como para salvaguardar su seguridad en los casos en los que estén solos.
Entre las funciones domóticas para mejorar el confort del hogar para personas de la tercera edad, podemos encontrar:
- Control de la iluminación. Un sensor que encienda o apague luces según detecte movimiento. De este modo, utilizar la iluminación cuando sea estrictamente necesario y además, evitar descuidos.
- Control de la temperatura. Programar los aparatos de climatización a las necesidades de cada persona para optimizar al máximo el gasto energético.
- Conexión mediante voz a altavoces inteligentes. Esta función puede facilitar la vida a personas con problemas de movilidad. Así, podrán dar instrucciones mediante la voz.
- Programar una rutina. De este modo, pueden instaurarse unos horarios para, por ejemplo, subir las persianas cuando amanezca, encender la calefacción a la hora de levantarse, o apagar los dispositivos a la hora de dormir.
Seguridad: El gran aliado para las personas mayores
Otro de los grandes beneficios que puede aportar la domótica al hogar de personas de la tercera edad es el cuidado de su seguridad. En España hay 4.889.900 personas viviendo solas, de las cuales, el 43,6% tienen más de 65 años. Esto significa que un porcentaje alto de nuestros mayores viven situaciones de inseguridad cada día.
Por ello, el control del hogar puede aportar tranquilidad a la vida de estas personas. Un buen comienzo puede ser la instalación de videoportero. De este modo, podrán ver, hablar y escuchar a la persona que está al otro lado de la puerta sin necesidad de abrirles. Así, evitarán encontrarse con desconocidos y enfrentarse a momentos incómodos.
Es cierto que los avances en domótica para facilitar la vida de nuestras personas mayores son innumerables. Pero, es importante también, enseñarles que cuentan con estas posibilidades, facilitarles el acceso a las mismas y sobre todo, enseñarles el uso y ventajas de todos estos dispositivos instalados en su hogar.