La salud digestiva es mucho más importante de los que muchas personas creen, pues no solo se trata de evitar problemas como el estreñimiento, los gases, las úlceras o las inflamaciones intestinales, pues un correcto funcionamiento del sistema digestivo también influye en otros órganos y sistemas, como el inmunológico, el cardiovascular o el nervioso, así como beneficia a órganos como la piel, el cerebro o el corazón.
Ahora bien, una correcta digestión pasa por el hecho de incluir los elementos adecuados a la alimentación, es ahí donde ganan protagonismo alimentos como la coliflor, una verdura altamente saludable que permite regular la digestión, esto gracias a sus múltiples propiedades y nutrientes.
¿Por qué es bueno comer coliflor para la digestión?
En primer lugar, hay que destacar que la coliflor es rica en fibra y que aporta una cantidad importante de agua, siendo estos dos elementos indeseables para el buen funcionamiento del sistema digestivo, ya que estimula el tránsito de los alimentos por el intestino, previendo así el estreñimiento y la acumulación de toxinas en el intestino, así como contribuye con la prevención del cáncer de colon y cáncer de estómago.
Además, la fibra y el agua de la coliflor también reduce la absorción de azúcar, carbohidratos y grasas por parte del intestino, lo que también contribuye con la prevención del sobrepeso o la obesidad.
El Departamento de Medicina Interna y Nutricional del Programa de Ciencias de la Universidad de Kentucky, afirma que un consumo frecuente de fibra ayuda a disminuir el riesgo de padecer obesidad, diabetes, enfermedad coronaria y accidentes cerebrovasculares.
¿Qué otros beneficios ofrece el consumo de coliflor?
Como ya hemos mencionado, el consumo de coliflor de manera regular no solo contribuye con el buen funcionamiento del sistema digestivo, sino que tiene repercusión en otras partes de nuestro cuerpo, ayudando a mantener una salud integral.
Dentro de los beneficios más importantes está la reducción del riesgo de padecer cáncer, ya que aporta una gran cantidad de antioxidantes que disminuyen el estrés oxidativo que producen los radicales libres sobre las células del cuerpo.
Aunque el efecto de dichos antioxidantes no se limita únicamente a la prevención del cáncer, estos también ayudan a mantener la salud del cerebro y del sistema nervioso, así como permite tener una piel en buen estado y retrasar la aparición de los signos comunes del envejecimiento.
De igual modo, la coliflor ayuda a regular la glucosa en la sangre, reduce el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas, aumenta las defensas del cuerpo y contribuye con el equilibrio hormonal.
¿Cómo comer la coliflor?
La coliflor puede ser consumida cruda o cocida, para la primera se debe lavar bien con agua y vinagre, mientras que si se desea cocinar, lo mejor es que sea por un periodo corto para evitar la pérdida de nutrientes.
De igual modo, si lo que queremos es cuidar nuestra salud, debemos usar métodos de cocción saludables, como por ejemplo al horno, al vapor, hervidas o asadas, también se puede sofreír con un poco de aceite de oliva.