Un trabajador que ejercía como ayudante de cocina ha logrado el reconocimiento de una pensión de incapacidad permanente total a través del Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares (TSJIB). Ha necesitado de un complejo proceso para conseguir la incapacidad permanente total.
En concreto, este ayudante de cocina presenta una serie de limitaciones funcionales en una pierna, causadas por un accidente de moto. Por tanto, se trata de una incapacidad permanente total derivada de un accidente no laboral.
Incapacidad permanente total de 1.360 euros
Se trata de un caso que vuelve a poner de manifiesto las dificultades a las que se enfrentan muchos ciudadanos en España para obtener el reconocimiento de una pensión de incapacidad permanente.
Inicialmente, este trabajador obtuvo la denegación por parte del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS). Desde la Seguridad Social consideraban que las secuelas que sufría el trabajador no le impedían desarrollar con normalidad las tareas de su profesión habitual como ayudante de cocina.
Además, desde el INSS también sostenían que el trabajador no había agotado todas las posibilidades terapéuticas posibles para recuperar la movilidad y conservar la capacidad funcional para ejercer como ayudante de cocina.
Ante esta desagradable situación, el trabajador decidió recurrir a la vía judicial. De este modo, el Juzgado de lo Social de Palma reconoció al trabajador una pensión de incapacidad permanente total, con una cuantía equivalente a 1.362,99 euros.
Hay que recordar que la cuantía de la pensión de incapacidad permanente total es equivalente al 55% de la base reguladora del trabajador. Si la persona beneficiaria se encuentra en paro y tiene 55 años o más, el importe de la pensión puede llegar a ser del 75% de la base reguladora.
¿El INSS puede recurrir la sentencia?
El Instituto Nacional de la Seguridad Social tiene derecho a reclamar contra una sentencia de este tipo. De hecho, en este caso, elevó una reclamación al Tribunal Superior de Justicia de Islas Baleares, alegando los motivos descritos anteriormente por los que denegó la incapacidad permanente total al trabajador.
A pesar de ello, el Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares ha ratificado la sentencia del Juzgado de lo Social de Palma, otorgando al trabajador el reconocimiento de la incapacidad permanente total.
En este sentido, es preciso explicar que el trabajador sufrió el accidente de moto en el mes de febrero de 2021. Fruto de dicho accidente, el trabajador presentaba varias lesiones en su pierna, por lo que pasó por un periodo de baja temporal. Posteriormente, las lesiones derivaron en un cuadro de artrosis postraumática severa.
Finalmente, el Tribunal Superior de Justicia de Islas Baleares ha certificado que las dolencias del trabajador no son compatibles con el desarrollo de las tareas fundamentales como ayudante de cocina.
Desde el Tribunal manifiestan que dichas actividades «son de corte físico, requieren bipedestación prolongada y movimientos forzados durante toda la jornada laboral». De este modo, argumentan que las secuelas y limitaciones «le inhabilitan para su adecuado y normal desempeño con el mínimo rendimiento y profesionalidad exigibles».
Dicha sentencia no es firme, ya que el INSS aún puede presentar un recurso de casación ante el Tribunal Supremo. Sin embargo, por norma general, no suele ser habitual que los casos de incapacidad permanente lleguen hasta el Tribunal Supremo, salvo en circunstancias muy excepcionales.