El de trabajador autónomo es quizás el sector más vigilado por Hacienda. En general, no es que sean ni más ni menos sospechosos que otros trabajadores, sin embargo, son los que desempeñan su actividad en sectores que tradicionalmente han estado más vinculado al pago con dinero en efectivo de sus productos o servicios.
Este es el motivo por el que la Agencia Tributaria, tiene desde hace años especial vigilancia hacia estos trabajadores. Es más, dentro de los autónomos, Hacienda tiene el foco puesto más en unos gremios que en otros.
No es nuevo que el pago con dinero en efectivo, sea un elemento de sospecha para las autoridades fiscales. Lo curioso es que las nuevas tendencias de pago, han facilitado esta tarea. En los últimos tiempos, el pago con dinero en efectivo ha caído claramente en desuso.
Como ya venía sucediendo, el uso de formas de pago alternativas como las tarjetas bancarias o aplicaciones como Bizum, han modificado nuestro modo de proceder en estos temas.
Por otra parte, la pandemia terminó de acelerar este cambio. Y es que el miedo al contagio por contacto, hizo que muchos usuarios dejaran de usar dinero en efectivo y los sustituyesen por otra forma de pago.
Lo relevante es que este suceso, ha facilitado a Hacienda su tarea. Al ser menos los pagos en efectivo, es más fácil localizar cuando se hace, más aún, si se trata de una cantidad importante. Por tanto, cada vez se señalan con más frecuencia los comportamientos ilícitos en materia fiscal.
Los autónomos más vigilados por Hacienda por usar dinero en efectivo
Este cambio de tendencia tras la pandemia por usar métodos alternativos de pago al dinero en efectivo, dio pie al Gobierno a reformar la ley contra el fraude fiscal. De este modo, desde el pasado 2021, el límite de pago de dinero en efectivo es de 1.000 euros. Mucho menos de los 2.500 euros que se permitían con la ley anterior. De igual modo ocurre cuando queremos retirar gran cantidad del banco, que para no tener problemas, debemos justificarlo o la entidad bancaria se ocupará de avisar a Hacienda.
Para justificar esta reforma, la ley especifica textualmente que «la utilización de medios de pago en efectivo en las operaciones económicas facilita notablemente los comportamientos defraudatorios, en sus distintas manifestaciones». Este cambio en la legislación fiscal, no viene sino a apoyar un trabajo que lleva años realizando la Agencia Tributaria. Un proceso de especial vigilancia, a sectores en los que se mueven grandes cantidades de efectivo o se usa ese medio de pago con frecuencia.
Con estas premisas, los autónomos son los trabajadores más controlados. El motivo es, que son los trabajadores en cuyos sectores de venta de productos o servicios, están más acostumbrados a realizar los pagos con dinero en efectivo. De hecho, Hacienda acota más el cerco al afirmar que este plan de especial vigilancia tendrá lugar en «aquellos sectores y modelos de negocio en los que se aprecie alto riesgo de existencia de economía sumergida». Acogiéndonos a estas directrices, los autónomos más vigilados son:
- Los dedicados a la hostelería y restauración.
- Los comercios.
- El sector de la construcción y las reformas.
- Los dedicados a la recogida de fruta.
- El sector de las operaciones inmobiliarias.
Así que si perteneces a algunos de estos sectores, tendrás que andarte con ojo si usas dinero en efectivo. La Agencia Tributaria te podría estar vigilando.