Se acerca el verano y la playa se convierte en uno de los sitios más visitados. Pero, ¿todo el mundo puede ir a la playa? Es una cuestión que mucha gente jamás se habrá preguntado, pero las personas con discapacidad o movilidad reducida se la preguntan antes de visitar una nueva playa. Esto se debe a que todas no cumplen con los criterios de accesibilidad, aunque cada vez son más las playas que son accesibles.
Pero cada vez son más los Ayuntamientos, Gobierno e instituciones que apoyan la inclusión de las personas con discapacidad, creando entornos más accesibles para las playas, para que todas las personas puedan disfrutar en igualdad de condiciones.
Elementos de accesibilidad que debe de cumplir una playa
En este artículo vamos a hablar sobre cuales son los criterios de accesibilidad que debe de cumplir una playa para ser accesible para las personas con discapacidad, con movilidad reducida o mayores. Una playa para todos es posible.
En primer lugar vamos a hablar de la accesibilidad en el entorno de la playa. Porque lo primero con lo que debe de cumplir una playa para ser accesible es tener un estacionamiento próximo a la playa con plazas reservadas para personas con movilidad reducida, según los baremos establecidos en la norma técnica y con las dimensiones adecuadas.
También debe de incluir un acceso seguro y accesible del estacionamiento a la playa, así como paraderos de transporte público accesibles. Además, se debe de incluir señales con los servicios ofrecidos, como la dirección hacía la playa, servicios higiénicos y otros servicios con los que cuenta la playa.
A esto hay que sumarle, que la señalética debe contar con pictogramas claros y alto contrates cromático, empleando material que no brille ni deslumbre.
Zona de aproximación
La zona de aproximación debe ser amplia que permitan la circulación fluida con mínimo de paso libre de 1,50 metros de ancho. La altura libre de paso de 2,20 m donde nunca pueden existir volados o cartelería que pueda ser un peligro para personas con discapacidad visual.
En cuanto a los pavimentos, deberán ser estable, sin huecos, antideslizantes en seco y mojado, evitando piedras o gravas. Además, debe de asegurar que su limpieza no afecte a la circulación. Por otro lado, se evitarán todo tipo de resaltes o desniveles con escalones aislados.
Si nos referimos a las rampas accesibles a la playa, siempre deberán de cumplir las limitaciones de la norma:
- Ancho mínimo de rampa: 1.20 m (la norma indica 90 cm, en rampas de playa recomendado mayor amplitud por dificultades por arena.
- Pasamanos a ambos lados prolongando 45cm en los extremos.
- Diferencias de nivel (Norma A-120)
- Menos de 25cm 12%
- 26cm – 75cm 10%
- 76cm – 1,20m 8%
- 1,21m – 1,80m 6%
- 1,81m – 2,00m 4%
- más de 2,01m 2%
Acceso a la arena
Si nos referimos al acceso a la arena, hay que tener en cuenta que hay que instalar pasarelas fijas con rampas de 1,20 – 1,50 metros de ancho y pendiente máxima de 6% sin llegar hasta la línea de pleamar.
Además, debe de ser un material antideslizante. Expertos en la materia destacan que Existen soluciones para conseguir accesibilidad en playas llegando hasta el mar de manera cómoda con una silla de ruedas.
Por último, lo ideal es que se instale una zona de sombra reservada para personas con movilidad reducida.
Otros servicios accesibles
Por último, debemos de destacar otros servicios que son muy importantes para mejorar la accesibilidad de las playas. En primer lugar, debe existir servicios higiénicos para todo el público, incluido unos servicios higiénicos adaptados para personas con discapacidad. Otros elementos importantes son las ayudas técnicas como sillas anfibias, sistemas de flotación, muletas, etc.
Las playas tiene que tener duchas que permitan el uso técnico por parte de personas con discapacidad o movilidad reducida.