Los subsidios son una herramienta fundamental para aquellas personas que no tienen empleo. Pues se trata de una ayuda económica que el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), contempla para los parados de larga duración. Y es que es fundamental que esta personas cuenten con unos ingresos mínimos con los que poder afrontar sus necesidades básicas, mientras hacen todo lo posible para acceder de nuevo al mercado laboral.
Sin embargo, las personas que se beneficien de estas prestaciones deben cumplir una serie de requisitos que demuestren, entre otras cosas, que realmente necesitan esta ayuda y que están haciendo todo lo posible para acceder a un empleo. Pues de lo contrario, el SEPE no entenderá que realmente necesite de este subsidio. Este requisito se traduce, en los parados de larga duración, en la demostración de que han llevado a cabo al menos tres acciones concretas para conseguir un trabajo. Pero, ¿Cómo se acreditan estas acciones?
Certificado de Búsqueda Activa de Empleo
Algunos de los subsidios destinados para parados de larga duración, para los que el SEPE establece que deben demostrar su búsqueda activa de empleo (BAE), son la Renta Activa de Inserción (RAI) o el subsidio extraordinario por desempleo (SED). En ambos casos, los beneficiarios deben realizar y acreditar, al menos tres acciones que demuestren que están en búsqueda activa de empleo.
Se trata de un requisito establecido, por tanto, a los parados de larga duración que no tienen acceso ya a otro tipo de prestaciones o ayudas. Es por ello, por lo que a pesar de que tanto la Renta Activa de Inserción (RAI) como el subsidio extraordinario por desempleo (SED), dependen del SEPE, para solicitarlos hay que conseguir previamente un certificado del Servicio Autonómico de Empleo, en el que se acrediten las acciones realizadas.
Por tanto, el documento que acredita la búsqueda activa de un trabajo, se expide desde las oficinas de empleo de las comunidades autónomas. Concretamente, a través de un certificado denominado BAE. De esta forma, el solicitante acredita las tres acciones de búsqueda de trabajo que ha llevado a cabo. Las acciones en concreto pueden ser:
- Participación en trabajos por cuenta propia o ajena.
- Inscripción en una agencia de colocación.
- Envío de currículos a al menos tres empresas.
- Realización de una entrevista de trabajo.
- Inscripción en dos portales de empleo.
- Presentación a una oferta gestionada por los Servicios Públicos.
- Participación en acciones formativas o informativas sobre autoempleo y emprendimiento.
La importancia de llevar a cabo estas acciones
En definitiva, que el solicitante del subsidio está llevando a cabo acciones que demuestre que está en búsqueda activa de empleo, debe estar acreditado por una agencia de colocación. El certificado expedido para tal fin, debe contar con la inscripción del solicitante, así como con la menos la demostración de que se han cumplido al menos dos de las acciones mencionadas en la lista anterior.
Esta acreditación es tan importante, que de no llevarse a cabo, el SEPE entenderá que el solicitante no está interesado en conseguir un trabajo y por tanto, no tiene derecho a ninguna prestación. En cualquier caso, lo importante es llevar a cabo estas acciones no con objeto de conseguir el subsidio, sino para cumplir con el objetivo de volver al mercado laboral. Es por ello, que puedes combinar las acciones conforme mejor te venga.
Así pues, puedes tanto enviar currículums a través de un portal de contrataciones, como realizar entrevistas de trabajo, así como realizar cursos de formación. En realidad, el objetivo es que las personas en situación de desempleo, consigan un trabajo con el que poder acceder a un salario que les haga subsistir.