La accesibilidad es la condición que permite que todas las personas -incluidas las personas con discapacidad y mayores– puedan tener igualdad de condiciones para todo. Por tal motivo, este concepto se ha convertido en una prioridad para las instituciones y empresas públicas o privadas.
La accesibilidad se basa en garantizar que los entornos sean accesibles y compresibles. De esta manera se conseguirá promover la autonomía de la persona, evitando situaciones de discriminación.
En este artículo vamos a hablar sobre la accesibilidad de las personas con discapacidad visual en los hoteles.
Accesibilidad en los hoteles
Desde la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) destacan que en términos de accesibilidad y discapacidad, la primera consideración para tener en cuenta es entender que todos los clientes, tengan o no discapacidad, deben recibir el mismo trato.
Por tal motivo, señalan que uno de los principales problemas a los que se pueden enfrentar es a las propias barreras mentales. Eso sí, estas pueden eliminarse con formaciones en materia de accesibilidad.
La interacción con personas con discapacidad debe hacerse desde la normalización y el sentido común.
Consejos para atender a las personas con discapacidad visual en los hoteles
La CEHAT ha elaborado una serie de pautas generales y consignas específicas para cada una de las áreas del hotel que serán de gran ayuda a la hora de atender a las personas con discapacidad visual.
En primer lugar, el trabajador deberá de identificarse con su nombre, hablando directamente a la personas con discapacidad visual. Además, se aconseja que conteste a sus preguntas y le informe siempre cuando se vaya a ir o a realizar otra actividad, para evitar que se quede hablando solo.
Otra recomendación es ofrecer ayuda e información (documentación de entrada y salida del hotel) sin forzarles, permitiendo a la persona con discapacidad visual realizar las cosas por sí misma.
Asimismo, y no solo en el hotel, sino en la vida en general, no es necesario levantar la voz cuando hablemos, una persona puede tener discapacidad visual y oír bien.
Los expertos en accesibilidad señalan que habrá que indiciar el acceso a las distintas instalaciones del hotel. Para ello habrá que evitar palabras como aquí, allí, esto, aquello…puesto que son palabras que se acompañan con un gesto, que en muchos casos no pueden ver. Es mejor utilizar términos como derecha, izquierda, delante, detrás…siempre con relación a la persona con discapacidad visual.
Además, destacan que nunca se debe de agarrar del brazo, sino que se debe ofrecer el nuestro y que ellos mismos lo tomen. Tampoco habrá que seguir a una persona con discapacidad visual sin advertirle, aunque sea con buena intención, ya que podría asustarse, si es necesario llamar su atención dándole el alto.
Más recomendaciones de la CEHAT
Otro de los consejos de la CEHAT es acompañar al cliente a su habitación si así lo desea e informarle de la distribución del mobiliario (explicar en círculo). En entornos difíciles, como en el restaurante, utilizar la técnica guía de acompañamiento, ofreciendo nuestro brazo y caminando un paso por delante.
Para ayudarle a sentarse, bastará con ponerle en contacto con el asiento y el borde de la mesa si la hubiera.
Para informar de la colocación de la mesa y la comida en el plato se pueden utilizar las agujas del reloj o términos concisos, como ejemplo:
- A las 12 las patatas o en la parte superior en el plato.
- A las 3 la ensalada o a la derecha en el plato.
- Ofrecer la posibilidad de cortar los alimentos (filete, pescado etc.).
Por último, señalan que el acceso de personas con perro guía es aceptado en todos los establecimientos.