El sistema de pensiones en España necesita una nueva reforma para reducir el gasto en pensiones. Por esa razón, aparece el Pacto de Toledo, una reforma, que ha propuesto incluir nuevos incentivos que primen a los trabajadores que retrasen su edad de jubilación.
En España, la edad media de jubilación está en los 64,6 años, y esta nueva reforma pretende que se sitúe entre los 65,8 y los 67 años. De esta manera, esta medida afectará a miles de trabajadores que tendrán que pensárselo algo mejor si pretenden retirarse de forma anticipada.
En el año 2019, 120.011 personas se jubilaron en España de entre 54 y 64 años, un 40% de todas las jubilaciones que tuvieron lugar en el pasado año. Desde la reforma de 2011, la edad de jubilación se ha ido retrasando progresivamente en los últimos años. Así, desde 2016 la edad media de jubilación ha ido aumentando, y ha pasado de 64,1 a 64,6 años en 2019.
Según los datos, la mayoría de las jubilaciones se produce a los 65 años, con más de 155.000 jubilados en 2019. Por su contra, no llegan ni a 17.000 personas las que se retiraron después de los 67.
¿Cómo serán los incentivos?
Por el momento no se sabe como serán las nuevas bonificaciones para retrasar la edad de jubilación. Ahora, hace falta que el Pleno del Congreso de los Diputados apoye las recomendaciones para que el Gobierno se ponga a trabajar en medidas concretas. En este momento, ya existen incentivos para las personas que alargan voluntariamente su jubilación, pero según el ministerio «apenas se utilizan». Es más, España es el país con las bonificaciones más bajas de la OCDE.
El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha defendido estas medidas en Al Rojo Vivo, después del acuerdo del pasado 27 de octubre. Escrivá sentenció que España era un país en el que se «incentiva poco el seguir trabajando».
En España sale rentable dejar de trabajar antes de los 65, eso sí, todo dependerá de la base de cotización que hayamos tenido. Otra de las medidas que se pretende aplicar, es la de unificar las reducciones anuales por jubilación anticipada, una penalización que tiene un efecto regresivo que perjudica más a las cotizaciones más bajas. Cuanto menos base se tenga, más penalización se sufre en la prejubilación, mientras que los cotizantes de bases altas podrán adelantar la jubilación sin tener un gran perjuicio.
El acuerdo de Toledo prevé ser votado el próximo 16 de noviembre, pero puede demorarse. Sin embargo, este paso en el Congreso no es más que un trámite, ya que el acuerdo fue respaldado por la mayoría de partidos, excepto Vox, que votó en contra, y por Esquerra Republicana de Catalunya y EH Bildu que se abstuvieron.