Mantener la seguridad en las carreteras es la principal función de la Dirección General de Tráfico (DGT). Es por ello que trabaja continuamente para actualizar señales y establecer normativa que ayude a cumplir este objetivo. Sin embargo, hay una serie de infracciones de las más peligrosas, que muchos usuarios siguen sin respetar y por tanto, la entidad de tráfico debe seguir imponiendo controles para conseguir de este modo que al menos se reduzcan. Cabe señalar, que parte de este trabajo se facilitaría si los usuarios tomaran conciencia de la peligrosidad de algunos actos.
Pero, ¿Cuáles son las infracciones más repetidas en carretera? Según datos de la DGT, el exceso de velocidad sigue siendo la infracción más repetida entre los conductores. Una peligrosa acción que además, provoca un gran número de accidentes a lo largo del año. Tras esta mala práctica, no cumplir con las obligaciones de la ITV, conducir sin carnet de conducir o no llevar el cinturón de seguridad puesto cuando se va en un vehículo, son el resto de infracciones que más se cometen.
Radares: Los gran aliados contra el exceso de velocidad
La Dirección General de Tráfico (DGT) no cesa en su intento por frenar que el exceso de velocidad siga siendo la infracción más cometida por los conductores. Y es que lo malo, es que además este acto de conducir por encima de los límites establecidos, es uno de los mayores factores de riesgo en las carreteras. Tanto es así, que los datos muestran que uno de cada cinco accidentes de tráfico con víctimas es consecuencia directa de esta causa.
Pero, ¿Qué armas tiene la DGT para actuar? El control es el mecanismo más eficiente para frenar este tipo de actuaciones. Controlar las carreteras, para poder identificar al infractor y de este modo, sancionarlo. Para ello, una medida eficiente es montar puntos de control con agentes de tráfico. Sin embargo, es insuficiente, pues no hay recursos suficientes ni es realmente factible abarcar los puntos suficiente para ello. Por eso, una de las herramientas más usadas por la DGT son los radares.
Los radares son aparatos que se instalan en determinados puntos de la carretera para que identifiquen al conductor que supere los límites de velocidad establecidos para esa vía. Estos pueden ser fijos, que son los instalados siempre en el mismo lugar y recogen la velocidad del vehículo a su paso; los de tramo, que también están en un mismo punto pero toman distintas referencias de velocidad para establecer una media de esa ruta; y finalmente, los móviles, que son los que cambian habitualmente de posición.
Nueva señal de la DGT para evitar que se cometa esta infracción
Este 2024, ha entrado en vigor una nueva señal de tráfico que la DGT incluyó como parte de la actualización del Reglamento General de Circulación llevada a cabo el pasado año 2023. Una reforma cuyo objetivo principal era mejorar la seguridad en las carreteras atendiendo a los nuevos cambios sociales y de movilidad.
La señal puede reconocerse por ser de forma cuadrada y de color amarillo, dos características que indican que no se trata de una prohibición, sino de un aviso informativo importante para los conductores. Concretamente, tal y como se indica desde el Ministerio del Interior, la señal es para informar de la «posible existencia de controles de velocidad mediante medios aéreos, como helicóptero o dron», en el tramo donde se encuentra.
La DGT ha denominado esta señal como S-991g, y su objetivo es controlar la velocidad mediante medios aéreos. Además, la DGT ha concretado que «En caso de que dichos controles tengan como objeto un tipo de vehículo en concreto, la señal podrá incluir únicamente el pictograma correspondiente a dicho vehículo». No obstante, el fin de esta señal es advertir a los conductores sobre la presencia de controles de velocidad que se llevarán a cabo con medios aéreos.