La leche es un alimento que la mayoría tomamos todos los días. Ya sea como complemento para tu café favorito, para combinarlo con tés e infusiones o para preparar postres esponjosos. Este producto lácteo es uno de los más vendidos en los supermercados. Sin embargo, muchas personas desconocen el tiempo que puede durar en perfectas condiciones en la nevera. Ahora, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha dado la respuesta definitiva. Para evitar tener problemas y saber cuándo está estropeada.
Y es que a pesar de que forme parte de muchas recetas y bebidas en el día a día de cualquier persona, hay ocasiones en las que tardamos en tomarla más de lo que deberíamos. Según la OCU, es importante saber cuándo debemos desecharla, y existen algunas pautas útiles para conservarla mejor durante más tiempo.
Los beneficios de la leche para el organismo se cuentan por cientos, ya que contiene en su composición una gran cantidad de nutrientes esenciales. No obstante, ¿sabías que esta es la misma razón por la que las bacterias crecen en su interior rápidamente?. En este sentido, lo mejor es que sepamos cuándo no es apta para el consumo si han pasado varios días desde que la abrimos.
La OCU diferencia entre distintos tipos de leche
Los distintos tipos de leche que encontrarás actualmente en el supermercado, cuentan con un un proceso de elaboración a sus espaldas que les permiten estar varios días en la nevera en perfectas condiciones. Sin embargo, esto no quiere decir que podemos tenerla tanto como queramos sin que se estropee.
Así, dependiendo del proceso de fabricación de la leche, la OCU establece distintos períodos de conservación si el envase está cerrado:
- Leche fresca o pasterizada (tratamiento tradicional): 3-4 días almacenada en frío (4 °C).
- Leche fresca o pasterizada (alta pasterización): 15 días almacenada en frío (4 °C).
- Leche UHT: 3-6 meses almacenada a temperatura ambiente.
- Leche esterilizada: 6-9 meses almacenada a temperatura ambiente.
Como puedes observar, cada uno de ellos cuenta con distintos tiempos de conservación. No obstante, una de las maneras de percibir si un envase de leche sin abrir no está en perfectas condiciones para el consumo, es fijándonos en si está hinchado. En este caso, lo mejor es que lo devolvamos al supermercado ya que se ha producido un problema durante el proceso de elaboración del producto.
¿Qué ocurre una vez abierto el envase?
Una vez que has abierto el envase de leche, lo primero que debes saber es que este debe conservarse en frío. Así, la mayoría de las que encontrarás en el supermercado se mantendrán en mejores condiciones si las guardas en la nevera. A temperaturas por debajo de los 5ºC. Además, la OCU resalta las diferencias en los períodos de conservación de cada una de ellas una vez abiertas.
- La leche pasterizada debemos consumirla en 2 o 3 días como mucho.
- La leche UHT y esterilizada aguantaría hasta 5 días en la nevera.
- La leche evaporada, una vez abierta, debemos consumirla no más allá de una semana.
- La leche condensada tiene un procesado en el que se añade una buena cantidad de azúcar, por lo que se mantendrá intacta incluso durante un par de semanas, siempre que esté bien tapada.
En este sentido, la leche UHT es una de las más consumidas en toda Europa. Esta compone la mayoría de la leche envasada en cartón que encontramos en un supermercado o tienda, que se encuentra fuera del frigorífico. Así que siguiendo esta estadística, lo más habitual es que tengas en la nevera este tipo de leche. Así que deberás consumirla en unos 5 días.
Así puedes saber si la leche está estropeada
Como hemos dicho antes, la OCU cuenta con algunos detalles que se pueden ver a simple vista para saber si la leche que tenemos en la nevera no es apta para el consumo. Así, lo mejor es que viertas la leche en un vaso y te fijes en su estado. Si está estropeada, verás puntos blancos que flotan o que tiene una textura cortada como el yogur.
Además de esto, tal y como ocurre con otros alimentos, el olor también reflejará que no debes consumir la leche. Así, la OCU advierte que si tiene un olor muy fuerte, lo normal es que no esté en condiciones para su consumo. Lo mejor es que le des un pequeño sorbo y si ves que el sabor es normal, la tomes sin problemas.