La edad ordinaria para acceder a la pensión de jubilación contributiva en España en 2022 es de 66 años y dos meses, para las personas que hayan cotizado menos de 37 años y seis meses durante la vida laboral. Por su parte, la edad de jubilación también es de 65 años para los ciudadanos que acrediten una cotización igual o superior a 37 años y seis meses durante la vida laboral. En 2023, la edad ordinaria de jubilación subirá ligeramente.
Uno de los aspectos que más preocupa a los ciudadanos es conocer cómo quedará la cuantía de su pensión de jubilación al poner fin a su vida laboral. Así, la Seguridad Social ha incorporado hace unos meses un interesante servicio a su Sede Electrónica, que permite realizar una simulación sobre su jubilación. Está pensado principalmente para los ciudadanos que se encuentran cercanos al momento de la jubilación.
Así, puede darse el caso de que un ciudadano llegue a la jubilación y entienda que la cuantía económica que le corresponde en su pensión contributiva es baja o que no se ajusta a lo que realmente pensaba que iba a percibir. En este caso, la Seguridad Social permite ‘engordar’ la cantidad de dinero a recibir en la pensión, a través de la modalidad de jubilación demorada.
Aumentar la pensión con la jubilación demorada
La jubilación demorada es una modalidad que permite al trabajador seguir trabajando más allá de la edad ordinaria de jubilación que le corresponde y retrasar el momento de su retirada de la vida laboral. A priori parece una idea poco llamativa y positiva para el ciudadano. Si bien, la ventaja de esta modalidad de jubilación consiste en la posibilidad de aumentar la cantidad económica a percibir por la pensión.
El 1 de enero de 2023 entró en vigor una medida clave de la nueva reforma de pensiones liderada por José Luis Escrivá, ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. En concreto, se trata de una serie de incentivos para que los trabajadores se decanten cada vez más por la modalidad de jubilación demorada. Según las estimaciones del Gobierno de España, esta medida ha contado con una acogida positiva durante sus primeros meses en marcha.
Con todo ello, estos son los incentivos que permiten ‘engordar’ la cuantía de la pensión contributiva de jubilación a percibir:
- Un porcentaje adicional del 4% por cada año de más cotizado por encima de la edad ordinaria de jubilación. La cuantía final obtenida se añade en la pensión contributiva al acceder definitivamente a la jubilación.
- Una cuantía a tanto alzado por cada año cotizado, que oscila entre 4.000 y 15.000 euros al año. La cantidad a percibir depende de los años de cotización previo al acceso a la jubilación demorada.
- Una combinación de ambos incentivos.
De esta forma, los ciudadanos pueden aumentar de forma considerable la cuantía a percibir en su pensión de jubilación, y en pocos años. Además, el Gobierno de España trabaja en aprobar diferentes incentivos para la modalidad de jubilación parcial. El objetivo es los ciudadanos también vean con buenos ojos la posibilidad de pasar de una vida laboral activa a cobrar la pensión en un proceso gradual.