La cuantía a percibir en la pensión de jubilación está determinada por varios factores fundamentales, aunque algunos de los más importantes son la edad de jubilación y los años cotizados durante la vida laboral a la Seguridad Social.
Por norma general, la pensión se jubilación es una prestación contributiva que se obtiene calculando la base reguladora; la cual determinará la cantidad a recibir. Así, en este 2022, la base reguladora se obtiene teniendo en cuenta las bases de cotización del trabajador a la Seguridad Social durante los últimos 25 años antes de acceder a la jubilación.
Desde la Seguridad Social aclaran que el importe de esas bases de cotización integra todas las percepciones salariales, dinerarias o especie que el trabajador pueda recibir en base a la relación laboral y por la prestación de su trabajo.
Eso sí, aclaran que esto será así siempre que ese salario no supere el importe máximo de las bases de cotización, que en 2022 se ha fijado en 49.672,8 euros. Por tanto, si el salario resulta mayor que la base máxima, siempre se cotizará de cara a la pensión por la base máxima.
En concreto, para calcular la base reguladora de la pensión de jubilación se obtiene calculando el promedio de las bases de cotización de los últimos 25 años; actualizadas todas en función del IPC. Así, la fórmula a partir de 2022 queda de la siguiente forma: 300 meses cotizados (25 años), dividido entre 350.
Cómo influye en la pensión los periodos no cotizados
Hay que tener claro que los ciudadanos en España cotizan a la Seguridad Social tanto cuando se encuentran activos laboralmente hablando, como cuando reciben la prestación contributiva por desempleo. Algunos subsidios, como el subsidio para mayores de 52 años, también permiten seguir cotizando para la pensión de jubilación.
Sin embargo, debido a que se tiene en cuenta un periodo de 25 años para el cálculo de la base reguladora, es posible que se produzcan lo que se conocen como lagunas de cotización. Es decir, periodos en los que el trabajador no ha cotizado a la Seguridad Social.
Si bien, las lagunas de cotización son periodos que también se tienen en cuenta para determinar el importe a percibir en la pensión de jubilación; tal y como explican los profesionales de ‘Jubilación de Futuro‘. Pero hay que tener en cuenta que son periodos en los que el trabajador no acredita ninguna cotización.
Teniendo en cuenta todo ello, para recudir los efectos negativos de las lagunas de cotización, la Seguridad Social establece una serie de reglas de integración con respecto a las mencionadas lagunas de cotización.
Integración de las lagunas de cotización
Normalmente, la integración de las lagunas se lleva a cabo adjudicando al menos que no ha habido cotización un valor ficticio por el que realmente no se contribuye. Así, lo que provoca es que se compute para poder calcular la pensión de jubilación.
Este procedimiento funciona de la siguiente manera en este año 2022, tal y como establece la Seguridad Social en su normativa para el cálculo de la pensión de jubilación:
- Las primeras 48 mensualidades sin cotización se integran con la base mínima existentes en cada momento con respecto al trabajador.
- En caso de que sean más de 48 mensualidades sin cotizar para integrar; a partir de la mensualidad número 48 se integran con el 50% de dicha base mínima.
En definitiva, los periodos no cotizados (lagunas de cotización) producen un determinado efecto penalizador sobre la cuantía final a percibir en la pensión de la jubilación, ya que se incorporan con la bases de cotización reducidas.