El momento de acceder a la jubilación es clave en la vida de cualquier persona. Después de una larga vida laboral, el trabajador mira con entusiasmo una nueva etapa de descanso percibiendo una pensión de jubilación labrada a base de contribuciones a la Seguridad Social.
El proceso de solicitud de la pensión de jubilación es relativamente sencillo. No obstante, existen ciertos aspectos a tener en cuenta en el momento de proceder a percibir esta prestación de carácter contributivo.
Primeramente, para acceder a la pensión de jubilación será necesario cumplir los requisitos establecidos por el sistema. Es decir, en este año 2021, la persona que quiera jubilarse con el 100% de la pensión deberá tener 66 años de edad en caso de haber cotizado menos de 37 años y tres meses.
Si bien, también es posible acceder al 100% de la pensión de jubilación con 65 años, siempre que el periodo de cotización sea superior a 37 años y tres meses.
Además, también es de obligado cumplimiento acreditar dos requisitos en cuanto a los periodos de cotización se refiere:
- Carencia genérica: Haber cotizado al menos durante 15 años durante la vida laboral.
- Carencia específica: Haber cotizado un mínimo de 2 años en el intervalo de 15 años inmediatamente anteriores al producirse el hecho causante.
¿Cuándo solicitar la pensión jubilación?
Hay que tener claro que la jubilación tendrá efectos económicos desde el día siguiente al cese de la actividad para aquellos trabajadores que se encuentren en situación de alta. Eso sí, siempre que la solicitud de haya llevado a cabo en los tres meses anteriores o posterior al cese.
En caso de que la solicitud se realice con posterioridad, los efectos económicos tendrán una retroactividad máxima de 3 meses.
También puede darse la circunstancia de de acceder a la pensión de jubilación desde una situación de no alta. En este caso, los efectos económicos se aplicarán desde el día siguiente a la presentación de solicitud.
¿Dónde solicitar la jubilación?
La solicitud de jubilación se debe presentar en cualquiera de los centros de atención e información de la Seguridad Social en el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS); salvo en el caso de los trabajadores del mar, que deben realizar dicho trámite en las direcciones provinciales del Instituto Social de la Marina (ISM).
Estos son los dos organismos encargados de otorgar el reconocimiento de derecho a percibir la pensión de jubilación. Además, junto a la solicitud debe acompañar todos los documentos requeridos por la administración para que todo esté en orden.
Todos los solicitantes deben identificarse de la misma forma ante la Seguridad Social durante la solicitud de la pensión de jubilación. En el caso de españoles, deben aportar del Documento Nacional de Identidad (DNI); mientras que las personas extranjeras residente o no residentes en España tendrán que aportar el documento de identidad vigente en su país o pasaporte, y el NIE.
Además, en función de la modalidad de jubilación a la que se acceda será conveniente proporcionar una serie de documentos específicos.
Así, la pensión de jubilación contributiva es una prestación de carácter vitalicio. Es decir, solo se extinguirá en caso del fallecimiento de la persona beneficiaria.