Beatriz Herranz ha iniciado una petición en Change.org dirigida a la Consejería de Sanidad de Castilla la Mancha para solicitar que no dejen de asistir a su hijo. Más de 165 mil personas han firmado ya la petición en las últimas horas, en la que se requieren unas 200.000 como objetivo.
La madre explica en su alegato que “hace unos días mi hijo Iker cumplió 6 años. De regalo, la Comunidad de Castilla la Mancha le ha quitado las terapias de atención temprana que necesita. A partir del martes que viene no puede venir porque ya tendrá 6 años”, según manifiesta que les informaron.
Explica que Iker tiene parálisis cerebral, por lo que hasta ahora acudía a sesiones de fisioterapia, de hidroterapia y de terapia ocupacional. Destaca su madre que “gracias a esas horas acompañado de los especialistas, Iker ha evolucionado un montón y ha evitado que su cuerpo se deforme”.
En Castilla la Mancha, cuando un niño con dificultades cumple 3 años pierde su derecho a recibir atención temprana gratuita. Cuando cumple 6 en casos excepcionales. Desde ese momento, indica, “sus padres tenemos que buscarnos la vida para pagar centros privados si no queremos dar la mejoría de nuestros hijos por perdida”.
Ruega a quienes vean la noticia que firmen la petición para requerir a la Consejería de Sanidad de Castilla la Mancha que acabe con esta restricción que impide recibir atención temprana a los niños mayores de 3 y 6 años que la necesitan, así como también solicitar al Ministerio de Sanidad de España que no permita que esto siga pasando en Castilla la Mancha ni en otras comunidades autónomas.
Lamentan que no solo en su comunidad, sino que también en muchos otros puntos de España, “están obligando a que los padres busquemos alternativas privadas que no todos podemos financiarnos. Si un niño como Iker deja de ir a terapia y ya no tratan sus músculos, sufrirá deformaciones muy graves en su estructura ósea. Si no fortalece sus pulmones como hacía hasta ahora, correrá más riesgo de sufrir infecciones. Y así con un montón de problemas que podrían evitarse simplemente continuando sus terapias”.
La madre asegura que “esto no es ni justo ni rentable. No es justo porque Iker y el resto de los niños no dejan de necesitar sus terapias solo por el mero hecho de cumplir 3 o 6 años. Y no es rentable porque la Seguridad Social tendrá que costear las intervenciones que los niños como él van a necesitar muy pronto si su deterioro progresivo no se evita a tiempo”.