Muy larga fue la lucha de Marcos Lechet para conseguir la homologación de las mascarillas accesibles para personas con discapacidad auditiva. Sin embargo, dos meses después de su aprobación, ninguna empresa ha adaptado la fabricación de mascarillas transparentes a la normativa, según ha adelantado FIAPAS.
En este sentido, la Confederación Española de Familias de Personas Sordas (FIAPAS) ha denunciado que no tienen conocimiento de que ninguna empresa del país haya adaptado la fabricación de sus mascarillas higiénicas transparentes, que permiten la lectura de labios, a los requisitos que exige la normativa del Ministerio de Consumo para su comercialización.
La lucha del colectivo de personas con discapacidad auditiva por conseguir la homologación de las mascarillas transparentes fue muy largo. De hecho, comenzó después de que el Gobierno decretara el uso obligatorio de estas, en julio de 2020.
Tras la entrega de decenas de miles de firmas en el Congreso y las iniciativas firmadas por varios grupos parlamentarios exigiendo esta homologación, el colectivo celebró que en febrero de 2021 el Boletín General del Estado (BOE) publicara la normativa de la ley. Por ello, se establecen los requisitos de información y comercialización de este producto.
Mascarillas destinadas a la lectura labial
En la norma se establece que estas mascarillas que tengan partes destinadas a permitir la lectura labial y que no facilite el paso del aire inhalado o exhalado, se permitirá que la eficacia de filtración de partículas indicada no se refiera a esas zonas, siempre que se indique en la propia etiqueta.
Además, deben permitir una visión nítida y sin empañamiento de la boca y se debe asegurar que el producto no obstruye la respiración. También, debe indicarse en la etiqueta si hay efecto distorsionador del habla», indica el escrito.
Sin embargo, casi dos meses después, FIAPAS ha reconocido que no tienen conocimiento de que ninguna empresa se haya adaptado a estas medidas . Además, señalan que solo «alguna» de ellas «parece tener algún producto de esta naturaleza ajustado a los términos que marca la nueva norma en fase muy avanzada».
A su juicio, la comercialización de estas mascarillas para las personas con discapacidad auditiva es muy «necesaria». Pero, además, recuerdan que esta iniciativa debe ir acompañada de otras medidas igualmente necesarias.
Problemas de comunicación y atención telefónica para las personas con discapacidad auditiva
La directora de FIAPAS, Carmen Jáudenes, llama a impulsar el uso de sistemas de inducción magnética o micrófonos en remoto. Todo ello para facilitar el acceso a la información y a la comunicación del más de un millón de personas con discapacidad auditiva en España.
«Tal como cualquiera de nosotros podemos experimentar, las mascarillas en todo caso minoran la audibilidad de la voz del interlocutor y la inteligibilidad del habla», señala Jáudenes.
Del mismo modo, actúan en ocasiones las mamparas, explica la entidad. También denuncia la falta de alternativas para el colectivo para la atención telefónica y las consultas médicas no presenciales. Por último, también se queja de la citación e información telefónica en el proceso de vacunación, entre otras.