El área de Servicios Públicos y Movilidad del Ayuntamiento de Zaragoza, prevé terminar este año con la actual lista de espera de usuarios de taxi accesible, un modelo que cuenta ya con 782 usuarios. Cuando se complete esta incorporación, de 109 más, serán casi 900 las personas con diferente grado de discapacidad que se puedan beneficiar del servicio.
La consejera municipal de Servicios Públicos y Movilidad, Natalia Chueca, se ha reunido con el presidente de la Cooperativa del Autotaxi, Jesús Gayán, y con el director general de la Fundación DFA, Luis Molina.
En este encuentro se ha perfilado el contenido del próximo convenio con el Ayuntamiento para la gestión del servicio de taxi Accesible. Si las previsiones se cumplen se podrá poner a cero la lista de espera actual.
Tal y como ha explicado Natalia Chueca, se produce un «beneficio en distintos frentes». Fundamentalmente, se ofrece a los usuarios un modo de transporte cómodo, seguro y muy flexible. Pero, por otro -ha añadido- se trata de un «nuevo impulso para el sector del taxi, que está sufriendo muy directamente los efectos de la crisis sanitaria».
Chueca ha recordado que cada año se producen unos 80.000 servicios de taxi adaptado. En ellos, el usuario –que tiene derecho a un número determinado de usos en función de su grado de discapacidad y del uso que le vaya a dar– sólo tiene que abonar, con la Tarjeta Ciudadana, la cantidad de 0,76 euros, equivalente al precio del autobús urbano pagado con tarjeta multiviaje. El resto del trayecto, hasta un máximo de 12 euros, se subvenciona por el Ayuntamiento.
Barrios rurales
Otra importante novedad que se incorporará este año será el incremento de esta subvención para los residentes en los barrios rurales de Zaragoza. Esta ayuda crecerá hasta los 24 euros como máximo por trayecto.
«Para ellos –ha explicado Natalia Chueca– los 12 euros actuales quedaban un poco ajustados. El coste medio de todos los trayectos en el último año ha sido de 8,9 euros, pero esa cantidad se supera frecuentemente en los trayectos a los barrios rurales».
Zaragoza cuenta ya con alrededor de 100 taxis adaptados, con lo que se supera el porcentaje mínimo exigido por la normativa, que es del 5 por ciento de la flota.
«Este porcentaje irá mejorando. A ello colaboran –ha dicho Chueca– las ayudas que el Ayuntamiento también ofrece para la adaptación de los vehículos, que este año rondarán los 80.000 euros». Se da la circunstancia, ha recordado la consejera municipal, que, además, existen ayudas municipales para la adquisición de vehículos eléctricos. Por este motivo, ya hay vehículos que son plenamente accesibles y sostenibles, lo cual es un doble beneficio para la ciudad».
Satisfacción de los usuarios
Para el director general de la Fundación DFA, Luis Molina, el taxi accesible es un servicio «muy bien valorado» por los usuarios, con el que consiguen gran autonomía y libertad para sus desplazamientos. «Esto es importantísimo para el desarrollo de su vida cotidiana, tanto laboral como social».
Una encuesta realizada el pasado año entre los usuarios del taxi accesible recoge que el 64 por ciento de los mismos considera que el servicio es «muy satisfactorio», y un 25 por ciento lo califica de «bastante satisfactorio».
La mayor parte de los usos realizados tiene que ver con el desplazamiento a sesiones de rehabilitación (43 por ciento), seguido de asuntos personales (31,5 por ciento), Educación regalada y formación (13,5 por ciento) y trabajo (12,6 por ciento).
Muchos beneficiarios del taxi accesible lo utilizan hasta 4 veces por semana (40,5 por ciento); aunque hay un porcentaje significativo (7,2 por ciento) que afirma hacer más de 14 viajes semanales. El modo de uso, con la Tarjeta Ciudadana, es valorado mayoritariamente como «muy sencillo» (63,1 por ciento) o «bastante sencillo» (22,5 por ciento).
También es muy bien valorada la atención telefónica recibida –la gestión es realizada por la Fundación DFA–, calificada por el 54,1 por ciento de los usuarios como «muy satisfactoria» o «bastante satisfactoria» por el 27,9 por ciento.