La cuantías garantizadas del Ingreso Mínimo Vital (IMV) volverán a tener una subida importante a partir del 1 de enero de 2025. Así lo ha confirmado la Seguridad Social tras desvelar el Instituto Nacional de Estadística (INE) el IPC (Índice de Precios al Consumo) del mes de noviembre de 2024.
En este sentido, el Gobierno de España ha asegurado que las cuantías de las pensiones contributivas se revalorizarán en un 2,8% en 2025. Por su parte, las cuantías de las pensiones no contributivas subirán por encima del IPC, lo que tendrá un efecto directo en las cuantías garantizadas del Ingreso Mínimo Vital.
Aumento de las cuantías del IMV en 2025
Las cuantías de las pensiones no contributivas subirán por encima de la revalorización media de las pensiones, hasta converger en 2027 con 75% del umbral de pobreza calculado para un hogar unipersonal.
Hay que recordar que en el año 2024 las cuantías de las pensiones no contributivas se revalorizaron en un 6,9%, mientras que las cuantías de las pensiones contributivas solamente subieron en un 3,8%. Igualmente, las pensiones no contributivas tendrán un aumento superior en 2025.
Desde la Seguridad Social indican que «una vez revalorizadas de acuerdo con el IPC, las pensiones no contributivas se incrementarán adicionalmente para reducir en un 20% la brecha existente hasta alcanzar el 0,75 del umbral de riesgo de pobreza calculado a partir de la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE) para un hogar unipersonal».
Con todo ello, las cuantías del Ingreso Mínimo Vital aumentarán en 2025 en el mismo porcentaje que lo hagan las pensiones no contributivas. Y es que las cuantías de la prestación del IMV se encuentran referenciadas al importe de las pensiones no contributivas.
El Gobierno de España aún no ha desvelado el porcentaje exacto de subida de las pensiones no contributivas y del Ingreso Mínimo Vital en 2025. En cualquier caso, las cuantías del Ingreso Mínimo Vital aumentarán por encima del IPC un año más.
Factores que influyen en la cuantía del Ingreso Mínimo Vital
Desde la Seguridad Social recuerdan que «el Ingreso Mínimo Vital es una prestación dirigida a prevenir el riesgo de pobreza y exclusión social de las personas que viven solas o están integradas en una unidad de convivencia y carecen de recursos económicos básicos para cubrir sus necesidades básicas».
La cuantía del Ingreso Mínimo Vital depende del número de personas que conviva en la misma unidad de convivencia de la persona beneficiaria. Este es uno de los factores principales más influyentes en el importe a percibir por esta prestación.
Cada año, el Gobierno de España establece una cuantía determinada para un beneficiario individual, conocida como Renta Básica Garantizada. Así, en 2024, la Renta Básica Garantizada es de 7.250,60 euros al año. Supone una cuantía de 604,21 euros al mes, ya que el Ingreso Mínimo Vital se devenga en 12 pagas anuales.
Igualmente, la Seguridad Social también aplica cada año unas cuantías específicas en función del número de personas que figuran en la misma unidad de convivencia. Además, también es posible cobrar los siguientes complementos junto con el IMV:
- Complemento por discapacidad.
- Complemento por monoparentalidad.
- Complemento de Ayuda para la Infancia.
Como conclusión, los profesionales de la Seguridad Social argumentan que «la cuantía del Ingreso Mínimo Vital para el beneficiario individual o la unidad de convivencia será la diferencia entre la renta garantizada y el conjunto de rentas e ingresos de tales personas, siempre que la cuantía resultante sea igual o superior a 10 euros mensuales».