El metabolismo forma parte de un complejo mecanismo que compone nuestro cuerpo y mediante el cual este va a conseguir quemar más o menos cantidad de calorías. Para mantenerlo con una buena actividad, lo mejor es que sigamos una alimentación saludable y seamos físicamente activos.
De hecho, el ejercicio físico es una de las cosas más importantes para aumentar la actividad del metabolismo basal. El metabolismo basal es el gasto calórico que nuestro cuerpo realiza a lo largo del día en reposo.
Por ello, es algo fundamental que intentemos mantenerlo en una salud óptima para poder conseguir perder peso sin necesidad de matarnos a hacer deporte.
Pero, a pesar de que existen algunos factores que van a ser determinantes para mejorar la actividad del metabolismo, lo cierto es que hay personas que tienen el metabolismo lento sin ningún motivo aparente.
Esto puede ocurrir debido a factores genéticos, hábitos perjudiciales que empeoran nuestra salud a diario u otras conductas que dañan el metabolismo.
En este sentido, existen una serie de síntomas comunes para que podamos saber que nuestro metabolismo funciona de forma ralentizada y que podamos ponerle remedio.
5 síntomas que avisan de que tienes un metabolismo lento
Para poder ponerle remedio a cualquier problema que tengamos en nuestro cuerpo, lo mejor es conocer algunos de los síntomas más comunes que aparecen. Así, cuando tenemos el metabolismo lento el organismo comienza a funcionar de forma distinta.
De esta forma, y debido a la importancia de aumentar la actividad del metabolismo para mejorar la salud, vamos a hablar de algunas de las consecuencias que te alertan de que debes cambiar tus hábitos a diario.
- Problemas de salud en la piel. Cuando nuestro metabolismo no funcione de forma correcta, nuestra piel comience a perder luminosidad y salud. Por ello, si ves que tu piel empieza a deteriorarse, aumenta la práctica de deporte y cuida tu alimentación.
- Engordas rápidamente. Cuando tienes el metabolismo lento tu cuerpo no pierde tanta cantidad de calorías como cuando funcione de forma correcta. Por ello, intenta aumentar la actividad física que realizas a diario.
- Cansancio muscular y fatiga. Si comienzas a notar que tu cuerpo se cansa de forma rápida y no tienes resistencia cuando realizar pequeños esfuerzos, puede ser que tu metabolismo se haya ralentizado.
- Tardas más en perder peso. Y es que una de las consecuencias directas de tener un metabolismo lento, es la dificultad para perder peso de forma rápida.
- Debilitamiento del cabello. El pelo es otra de las partes de nuestro cuerpo donde más se refleja nuestra salud. Por ello, si ves que la salud capilar comienza a ser más débil, puede ser que tu metabolismo esté perdiendo actividad.
Además, para evitar tener el metabolismo lento, puedes aumentar la ingesta de agua a diario. Y es que mantenernos hidratados es una de las cosas más importantes a la hora de cuidar nuestra salud y prevenir problemas de cualquier tipo.
¿Qué puedes hacer para acelerarlo?
Una de las comidas del día que puedes modificar para conseguir acelerar el metabolismo son las cenas. Y es que, según los expertos, lo más adecuado es cenar de forma ligera. Ya que por la noche es cuando nuestro cuerpo consigue quemar menos cantidad de calorías.
Además, también debes pensar que una ensalada no contiene ningún tipo de condimento que aumente sus calorías si quieres utilizarla como alimento para perder peso.
De esta forma, prepara tus ensaladas sin incluir ningún tipo de sustancias calórica, como mayonesas o condimentos con una gran cantidad de grasas saturadas.
Además, la actividad física es algo que debe formar parte de tu vida diaria de forma constante. Ya que esto es fundamental para aumentar el gasto calórico y eliminar toda la grasa que se pueda acumular en nuestro cuerpo.